sábado, 15 de mayo de 2010

ópera, taxis y siesta

Por cierto, con la alegría de la noticia del concurso de Vero, se me olvidó: la ópera, preciosa. Ha sido un gusto pasar la tarde con Elia escuchando música maravillosa... ¡gracias Karlos!

Son las 12 y veinte. Al final me iré al aeropuerto en taxi. Les tengo mucha manía, pero el metro no empieza hasta las seis que es cuando debería estar allí, y creo que ya estoy un poco mayor para irme ahora en el último metro y pasar la noche en el aeropuerto esperando...

Voy a terminar de preparar las cosas y me echaré una siesta antes de salir.

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